Una de las esperanzas que existe actualmente para reducir morbilidad por enfermedades trasmisibles es poder disponer de vacunas seguras y efectivas para administrar a la población. Con estas vacunas se pretende conseguir la inmunidad colectiva que permita romper la cadena de transmisión. Estudiar el impacto que ha tenido el empleo de inmunógenos anti Sars Cov 2 en la población cubana ha sido una tarea que ha motivado nuestro estudio, evidenciándose un decrecimiento en la incidencia de los casos confirmados a la Covid 19 en los meses en que se lograron completar el mayor número de pacientes con esquema completo de vacunación anti Sars Cov 2, algo similar mostró Oliveros et al. ¹⁴ y Baltas et al. ¹⁵ en su estudio quien refiere “En esta cohorte, se salvó una vida cada cuatro o cinco vacunaciones.

En este estudio el número de pacientes que completaron las 3 dosis del inmunógeno anti Sars Cov 2 constituyó una cifra considerable para establecer una asociación causal con la reducción de la tasa de incidencia acumulada en 14 días de casos confirmados a la Covid 19,fundamento necesario para valorar que el porcentaje de la población que debe ser vacunada en el primer año es mucho mayor que el porcentaje que debe ser vacunado una vez que el sistema se haya estabilizado después de unos años, ya que la mayoría de la población será susceptible cuando se inicie la inmunización masiva, pero al cabo de unos años, es de esperar que una alta proporción esté inmunizada de manera que se cree una inmunidad colectiva efectiva. ^{( 16 , 17}

Esta inmunidad colectiva depende de muchos factores, siendo uno de ellos el número básico de reproducción o Ro, que es el promedio de casos secundarios que genera un caso infectado. Esta Ro se estima que es entre 2,5-3,5, por lo que se calcula que se necesita tener entre un 60-72% de población inmunizada para llegar a conseguir este «escudo» poblacional. ¹⁸

Dentro de las características en el grupo estudiado se encontró que existe un aparente riesgo con el aumento de la edad, esto es congruente con literatura del resto del mundo, así Villagrán et al. ¹⁹ muestra en su serie de pacientes estudiados una mayor morbimortalidad por la Covid 19 a medida que más se incrementaba la edad, esto quizás aparejado al hecho de la susceptibilidad inmunológica relacionado con el envejecimiento, ²⁰ por otra parte muchos autores plantean que el incremento de casos está relacionado con el aumento de la movilidad y esto se observa más en adultos en edad laboralmente activa. ^{( 21}

En cuanto a la incidencia de casos por género en esta investigación, se evidenció un incremento en pacientes del sexo femenino, algo que no es lo característico en la mayoría de los estudios que en el mundo analizan el comportamiento clínico epidemiológico de los pacientes diagnosticados con Covid 19, ^{19 , 22 , 23} y que describen una paridad de los datos, así en su estudio Hawkes et al. ²⁴ refiere “A nivel mundial, las mujeres tienen más probabilidades de someterse a las pruebas (el 57% de las personas que se someten a las pruebas son mujeres), la misma probabilidad de ser diagnosticadas con COVID-19 (50% de los casos)”, razón que tal vez justifique el resultado de nuestro estudio. Las diferencias biológicas entre los sexos pueden afectar a los mecanismos patogénicos de la COVID-19, al riesgo de infección y a la gravedad de la enfermedad, sus resultados y sus biomarcadores. ²⁴

Cuando se analiza la incidencia de casos confirmados a la Covid 19, en relación a la densidad poblacional por población de cada consultorio médico de la familia del área de salud donde se realizó nuestro estudio, podemos apreciar que aquellos que tuvieron mayor porcentaje de casos, fueron los que atendían poblaciones urbanas o sub urbanas con mayor asentamiento poblacional. Los habitantes de regiones con mayor índice de población (incluidas las ciudades) pueden tener un alto riesgo de sufrir una infección por coronavirus y mortalidad por COVID-19. ²⁵ La densidad poblacional es el indicador demográfico que influye en el número de casos confirmados con covid-19, y que puede interactuar con otros indicadores demográficos como el grado de urbanización, debido a la movilidad e interacción que se genera dentro de los territorios, un elemento que resulta consustancial al modo de vida urbano. ^{( 26}

En este estudio se encontró mucha similitud con lo expuesto por Díaz Pinzón, ^{( 27} en su estudio “Impacto del suministro de vacunas contra COVID-19 sobre la letalidad por SARS-COV-2 en Colombia”, quien expuso una correlación fuerte e inversa de la intervención con inmunógenos anti Sars Cov 2, y la reducción de la letalidad y la incidencia de casos, declarando a estos inmunógenos como un factor protector.

Un estudio realizado en argentina por Scruzzi et al, ^{28 )} plantea que “El haber recibido una o dos dosis de vacuna reduce el riesgo de enfermar en 98% (una dosis) y 99% (dos dosis) y reduce el riesgo de morir en el 83% (una dosis) y hasta el 97% (dos dosis) de los casos en la población general”, en este estudio se analizó el impacto en la morbilidad por Covid-19, pero después de aplicada la 3ra dosis, es decir con esquema completo, y los resultados fueron similares a los obtenidos en el mencionado estudio.

Son muchos los estudios, ^{10 , 11 , 27} que ha encontrado asociación entre el número de casos confirmados a la Covid-19 y el empleo de los inmunógenos anti Sars Cov 2, sobre todo aquellos que logran tal impacto después de haber logrado una cobertura vacunal superior al 70%, resultado que logran una gran similitud a lo expuesto en este trabajo. Hecho este relacionado a haberse logrado un escudo poblacional de inmunización, y a la inmunidad de rebaño.